Hace unas semanas, la familia había denunciado sobre la desaparición de la joven debido a que un grupo de hombres la había secuestrado en la zona sur de Buenos Aires. Sin embargo, esta información terminó por desmentirse, la policía actuó y descubrieron que los mismos denunciantes la tenían en su casa mientras la sometían sexualmente.
Se trata de Lucía Paz, una joven 20 años, cuyos padres habían realizado la denuncia correspondiente ya que no conocían el paradero exacto de ella y aseguraron que una camioneta blanca que circulaba por Glew, Almirante Brown, la había secuestrado. Más tarde, las autoridades comprobaron que la historia era falsa debido a algunos testigos claves.
Al parecer este relato solamente era una excusa y una coartada para despistar a todos, ya que la joven estaba encerrada en su mismo hogar en donde José Martín Paz de 54 años y Patricia Ayala de 50 años la usaban como una sirvienta mientras estaba privada de su libertad.
Hace una semana, un hombre de 43 años que dijo ser el novio de la víctima, acudió a la Justicia para asegurar que ese mismo lunes 24 en donde no había más noticias de Lucía, la misma se escapó para ir a su casa.
Además, reveló que la joven presentaba algunas heridas en la cara y los brazos, ya que su padre había estado ebrio durante el sábado y la obligó a bailar para él. Paz se negó y él respondió con una agresión, por lo que abandonó su domicilio.
Finalmente, ambos progenitores fueron detenidos en donde vivían y tenían retenida a su hija, en la calle Sargento Rojas al 300, en donde se hizo el allanamiento y posteriormente los trasladaron a la comisaría 7ma de Glew.
El procedimiento estuvo a cargo la fiscal Vanesa Scansani, la titular de la UFI N°9 de Lomas de Zamora, quien caratuló la causa por Trata de personas, reducción a la servidumbre, abuso sexual y lesiones leves agravadas por el vínculo.
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