Se la conoce también como » falso estrabismo» y se hace visible cuando hay cansancio, agotamiento visual o mucha exigencia para la vista.
La visión borrosa o doble y el dolor de cabeza han empezado a afectarte. Un día, te miras al espejo o te tomas una selfie y notas que uno de tus ojos aparece desviado, hacia dentro o hacia afuera, hacia arriba o hacia abajo… En otro momento, tus ojos se ven alineados perfectamente…. ¿Qué está sucediendo? Esta es una de las formas más frecuentes en que descubrimos una disfunción ocular relativamente común, benigna pero alarmante, llama foria. Es necesaria una consulta oftalmológica.
La foria ocular es la desviación oculta de los ejes visuales que, por lo general, se manifiesta en circunstancias especiales como episodios de estrés crónico y cansancio. La mayor parte del tiempo, las forias permanecen ocultas porque son compensadas por los reflejos complementarios, llamados «reservas fusionales» que se encargan de mantener los ojos alineados a pesar de la existencia de una foria.
Cuando una persona está muy cansada o estresada, las reservas fusionales no son suficiente para compensar la foria, provocando que ésta se haga notar y origine síntomas como visión borrosa, visión doble y dolor de cabeza.
Las forias no son lo mismo que las tropias, lo que conocemos como estrabismo, ya que este es una alteración de la visión binocular que provoca la desalineación de los ejes del ojo e impide que ambas estructuras puedan enfocar en un mismo punto a la vez, lo que se manifiesta en forma continua.
Las forias se clasifican según la dirección en la que se desvía el eje ocular.
-Exoforia: el eje ocular se desvía hacia afuera.
-Endoforia: el eje ocular se desvía hacia adentro.
-Hiperforia: el eje ocular se desvía hacia arriba.
-Hipoforia: el eje ocular se desvía hacia abajo.
¿Cómo detectar la presencia o desviación de la foria ocular?
Para diagnosticar las forias, tropias o estrabismo el método más eficaz utilizado por los oftalmólogos es el cover test. Esta prueba consiste en ocluir un ojo y destaparlo de forma intermitente mientras el paciente observa fijamente un objeto con ambas estructuras oculares. Los movimientos que realiza el globo ocular durante el examen permiten al oftalmólogo diagnosticar las forias, medir el nivel de desviación y determinar su magnitud y dirección.
¿Se puede tratar?
Cuando un paciente presenta una foria descompensada que está afectando a su visión, el oftalmólogo indicará en primer lugar mayor reposo visual y medidas para bajar el estrés. También puede utilizarse un conjunto de ejercicios oculares que se realizan con el fin de fortalecer y mejorar el funcionamiento de los músculos extrínsecos del ojo, los cuales son los responsables del movimiento del globo ocular. El uso de gafas con prismas en sus cristales, que producen una refracción especial de la luz, también es de gran ayuda para compensar las forias y evitar el sobreesfuerzo ocular.
Fuente: Área Oftalmológica avanzada del Hospital Universitario Dexeus, Barcelona.
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