Se realizaron 4.531 controles de alcoholemia en CABA de los cuales 52 fueron positivos

Un total de 52 conductores resultaron positivos en el marco de los 4.531 controles de alcoholemia vehicular que se realizaron hasta las 10 en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), tras los festejos de Año Nuevo, se informó hoy oficialmente.

Con motivo de los festejos por Año Nuevo, desde anoche se dispusieron 20 puestos de control de alcoholemia vehicular en punto estratégicos y rotativos de la ciudad, consignaron fuentes de tránsito de CABA.

Hasta las 10, se realizaron un total de 4.531 controles en lo que hubo 52 positivos, siendo 1,1% el índice de positividad.

En Nochebuena, para la misma hora, se había realizado casi la mitad de los controles debido a la lluvia, mientras que el porcentaje de positividad «es similar», indicaron.

A su vez, el dosaje más alto hasta el momento fue 1,34 gramos de alcohol por litro de sangre.

«Se estima que uno de cada cinco siniestros fatales registrados en la Ciudad de Buenos Aires están relacionados con el consumo de alcohol, por eso esta es una política clave para reducir los incidentes viales y los Agentes de Tránsito realizan operativos los 365 días del año», sostuvo la Secretaría de Transporte y Obras Públicas porteña en un comunicado.

En este sentido también informó que desde 2016 a noviembre de 2023 los controles de alcoholemia se incrementaron más de 200%, mientras que la cantidad de positivos disminuyó de 3,3% a 1,2%.

Durante el 2023 se realizaron por día más de 1.100 controles de alcoholemia -un 12,3% más que en 2022- y se detectaron en promedio 14 conductores positivos diarios, lo que implicó la retención de 4.505 licencias por un mínimo de dos meses.

En la Ciudad de Buenos Aires, el límite máximo tolerado de alcohol en sangre es de 0,5 gramos por litro (gr/l) para vehículos particulares, 0,2 gr/l para motociclistas y 0,0 gr/l para principiantes y conductores profesionales.

En los controles se realiza una verificación de la documentación en la que se debe acreditar la licencia de conducir, la cédula verde y el seguro del vehículo, además de un examen para determinar la presencia de alcohol, y a quienes den positivo se les realiza un test con alcoholímetro para determinar el dosaje.

Todos los conductores que den positivo en un control de alcoholemia son inhabilitados por un mínimo de dos meses y un máximo de dos años, recordó la cartera de Transporte.

Entradas relacionadas