Hablar de violencia, genera sin dudas temor, incertidumbre en todas sus manifestaciones, escuchamos que la sociedad está violenta, que los jóvenes son más violentos, que los niños, docentes, padres…son violentos…considero pertinente tener en cuenta que este flagelo no discrimina situación socio-económica, estatus social, raza, religión, edad ni tampoco sexo…en los últimos años se acuñó el término violencia de género ya que justamente se considera que no es una situación que vive sólo la mujer, si bien son quienes por lo general forman parte del porcentaje más afectado no es excluyente, como lo mencioné anteriormente la violencia no segrega…sólo sucede.
Es importante tener en cuenta que la violencia existe desde los inicios de la humanidad…por eso es bueno tener en cuenta la historia… por ejemplo en el Siglo XVII era permitido y aconsejado a los esposos maltratar a sus mujeres, ya que eran su posesión y ellos tenían el poder. Desde 1939 a 1969 hay una carencia de referencias a cerca de las mujeres golpeadas. Se las trataba como si fueran ellas el origen del problema.
En los años 70 un movimiento de mujeres comenzó a tratar el tema y se supo que millones de mujeres sufrían de violencia en su matrimonio. Recién ahí se comprendió que la violencia era una forma de control que escamoteaba a las mujeres la autoestima, libertad y la dignidad.
Paulatinamente se comenzó a hablar del tema, y se priorizó la violencia hacia la mujer, muchos años después es que algunos hombres se animaron a aceptar que eran también víctimas de violencia.
Para aclarar cuando hablamos de mujer golpeada nos referimos a: “la mujer que ha sufrido abuso físico intencional o ha sido forzada a realizar acciones que no deseaba, por un hombre con el cual había establecido con ella un vínculo, que generalmente incluía intimidad sexual, estuviera o no legalmente casado”. Hoy por hoy este concepto también se utiliza para definir la violencia hacia un hombre.
Ahora bien la violencia se manifiesta de maneras diferentes, de hecho en las relaciones tóxicas de este tipo, comienzan con demostraciones de amor legítimas paulatinamente comienzan a ser un tanto posesivos con su pareja, quieren saber donde están todo el tiempo, le controlan las claves de celular, Facebook, instagram, controlan las redes sociales, manifiestan no estar de acuerdo con la forma en que se visten, que actúan o que hablan…en ocasiones de esta manera comienza lo que se conoce como Violencia Psicológica: se da a través del maltrato verbal, acoso, rechazo, reclusión y privación de los recursos físicos, financieros y personales. La persona puede llegar a sufrir depresión se encierra, sufre otros síntomas, le hace el diagnóstico de loca y puede llegar a suicidarse.
Esto luego suele derivar a otro tipo de violencia más fuerte como la Violencia Física: se da a través de agresiones físicas, golpes (de puños, con los pies, con palos o diversos elementos). Atentando contra la salud de la persona produciendo lesiones leves, graves o gravísimas hasta homicidios
Otro tipo de violencia que suele ejercerse es la Sexual: se da a través de actos u omisiones que infrinjan burla y humillación de la sexualidad, inducción a la realización de prácticas sexuales no deseadas y actitudes dirigidas a ejercer control, manipulación o dominio sobre otra persona, así como delitos contra la libertad y el normal desarrollo psicosexual.
En la mayoría de los casos se ejerce también Violencia Económica: se da a través daño, pérdida, transformación, sustracción, destrucción, ocultamiento o retenciones de bienes, instrumentos de trabajo, documentos o recursos económicos. Por ejemplo las víctimas refieren: no tener dinero para alimentos- remedios- le han sustraído documentaciones tales como Documentos Nacionales de Identidad, escrituras, boletas de compras de muebles- roturas de muebles-etc.
Estas manifestaciones no son excluyentes, por lo general se dan en conjunto, aunque se van acrecentando con el tiempo.
Considero pertinente aclarar que hay un “ciclo de la violencia”, que hace que la mujer o el hombre continúen en una relación de este tipo, ya que creen poder manejar la situación y cambiar a otro…dicho círculo consta de las siguientes variables: ACUMULACIÓN DE TENSIÓN EN LA PAREJA, esto se da cuando la pareja discute por situaciones cotidianas ya sean reales o imaginadas por una de las partes, ECLOSIÓN AGUDA DE VIOLENCIA, donde se da la expresión concreta por lo general ya se ha ejercido la violencia psicológica y llegan a la física…posteriormente llega el período LUNA DE MIEL O AMOR ARREPENTIDO donde el agresor dice arrepentirse de lo hecho y jura no volver a hacerlo…empero en un tiempo vuelve a suceder la acumulación de tensión y vuelven a estallar…por eso se habla de un ciclo, ya que es cíclica la situación…esto hace que la relación se transforme en algo realmente tóxica.
Ahora la pregunta que todos se hacen es porqué la mujer o el hombre se quedan en una relación violenta, los motivos son variados entre ellos: miedo, dependencia, indefensión aprendida, negación, justificación, aislamiento, falta de apoyo institucional y familiar, falta de un lugar seguro y protegido…por mencionar solo algunos.
La denuncia es una manera de frenar esta situación, lamentablemente existe una cifra negra, personas que viven en situación de violencia y no se animan o no saben qué hacer para salir de esta situación espantosa y denigrante.
Ahora bien, en lo que va del año sucedieron 59 femicidios, al menos hasta el 21 de febrero de 2021, que nos enteramos…aterrador porque la mayoría si había llevado a cabo denuncias, incluso algunas tenían botón anti pánico; surge entonces el enigma de saber porque los organismos que deberían proteger esta situación no lo pueden hacer, están desbordados. Pareciera que estimula al violento el hecho de ver tanta violencia, la impunidad que sienten es mayúscula, justamente esa persona que han agredido durante un tiempo sienten que es un objeto que les pertenece y que absolutamente nadie puede intervenir en esto…ni siquiera la justicia.
Qué nos queda entonces…sumergirnos en la queja o comenzar a observar cuales serían las opciones posibles para que esto deje de suceder, parecería utópico…estoy convencida que una de las posibilidades más positivas es la prevención…que comienza desde la niñez cuando enseñamos a los niños a respetarse, cuidarse y manifestar aprecio antes que agresión. Elevar su autoestima, que sepan defenderse, que crean en ellos mismos… esta responsabilidad es de los padres, maestros y todas aquellas personas que rodean al niño.
Por otro lado es importante el compromiso social, ante una persona violenta, amig@, herman@, compañer@ de trabajo, vecin@, frenar la situación personalmente o a través de denuncias. Dejar de naturalizar la violencia…por momentos la sociedad parece anestesiada antes tanto dolor, debemos despertar es una responsabilidad de todos.
Considero pertinente destacar que la violencia física es usada por aquellos que carecen de argumentos para imponer criterio y renuncian a la razón.
En el nombre del amor se llega a extremos de convivencia que incluyen violencia física o psicológica, insultos o descalificaciones, ignorancia y desprecio, o hipercontrol, lo que se denomina MALTRATO.
Nadie está libre de establecer relaciones de poder con su pareja; pero debe quedar claro que, en una relación de maltrato, una de las dos personas ha perdido su libertad, está dominada, anulada, aunque crea que por mandato cultural se deba sufrir por amor.Jamás en AMOR lastima, sino que debe cuidar hacerle bien al otro, y fundamentalmente saber que: CUANDO NO PODES SER VOS, cuando ante la otra persona debes modificar tu forma de actuar, cuando no podes ver a las personas que eran tus amigos porque no le gusta, cuando sentís que te aleja de tu círculo íntimo…cuidado esa es una luz de alarma… porque el verdadero amor nos acepta tal cual somos…no nos quiere cambiar…si no que nos acepta, nos valora y admira.
Lic. Sandra Maldonado
M.P.3401
Debe estar conectado para enviar un comentario.