El brasileño y su amigo, Ricardo Falco, están acusados de participar de una «violación en grupo» a una joven en 2013.
El nombre de Robson de Souza, Robinho, resurgió hoy cuando el Tribunal de Apelación de Milán confirmó la condena a nueve años de prisión para el futbolista brasileño y su amigo, Ricardo Falco, por haber participado de una «violación» en grupo» a una joven en una discoteca de esa ciudad italiana en 2013.
Tal como publicó Globoesporte y replicó el diario As, la sentencia data de diciembre del año pasado pero recién se hizo pública hoy, apenas un día antes del vencimiento del plazo legal.
En el texto que fundamenta la sentencia los jueces Francesca Vitale, Paola Di Lorenzo y Chiara Nobili remarcaron «el particular desprecio de Robinho por la víctima, que fue brutalmente humillada», y que además el futbolista «intentó estafar las investigaciones ofreciendo a quienes las llevaban adelante una versión falsa de los hechos acordados».
En la tercera y última instancia la defensa del futbolista dispone de 45 días para apelar ante el Tribunal de Casación de la Justicia italiana.
Robinho y Ricardo Falco son acusados y condenados por abusar sexualmente de una mujer albanesa en el club nocturno Sio Café, de Milán, en enero de 2013, cuando el brasileño jugaba para el Milan (ahora está sin club).
En la sesión que se llevó a cabo en diciembre, donde se ratificó la sentencia, el Tribunal de Apelación desestimó el recurso de los abogados del jugador de exjugador de Santos, de su país, Real Madrid, de España, y Manchester City, de Inglaterra.
Robinho reside actualmente en Brasil y como este país no extradita a sus ciudadanos, desde Italia se deberá remitir una orden de arresto internacional para que sea llevado a prisión y cumpla con la condena establecida.
La defensa de Robinho alegó en el juicio que hubo consenso entre la mujer y el futbolista en el acto sexual. En 2014, el delantero señaló que hubo sexo oral, pero con el consentimiento de la mujer y sin la participación de más personas.
Sin embargo, el testimonio de la víctima y las pruebas alcanzadas durante la investigación, indicaron que la mujer estaba «completamente borracha» cuando fue sometida a relaciones sexuales sin su consentimiento con el futbolista y su grupo de amigos.
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