Lo condenaron por un crimen que no cometió y estuvo 43 años preso

Ocurrió en Estados Unidos. Kevin Strickland fue liberado de sus cargos por los que pagó injustamente durante más de cuatro décadas.

Un hecho increíble tuvo lugar en el tribunal estatal de Misuri, Estados Unidos. Allí, un ciudadano afroamericano fue absuelto y liberado después de 43 años por un crimen que no cometió.

Debido a un error judicial, Kevin Stickland, de 62 años, había sido condenado en 1979 a cadena perpetua, acusado un triple asesinato ocurrido un año antes en Kansas City, Misuri. El jurado estaba conformado, en su mayoría, por gente blanca. Tras revisar el caso, el juez James Welsh ordenó este martes su liberación inmediata.

El 25 de abril de 1978 ocurrió un triple crimen en Kansas City. Tres personas fueron halladas sin vida, atados y con signos de fusilamiento. En ese entonces, Cynthia Douglas, la única sobreviviente, identificó a Strickland como uno de los cuatro hombres responsables de la matanza. Gracias a este testimonio, Kevin fue declarado culpable en un segundo juicio donde se lo condenó con cadena perpetua.

Sin embargo, las pruebas mostraban lo contrario. Dos de los hombres condenados por los asesinatos dijeron que Strickland no estaba involucrado e identificaron a otro par como participes. Asimismo, tampoco existió evidencia alguna que vinculara a Kevin con el crimen, incluso tenía una coartada firme. Pero el testimonio de la mujer fue suficiente para encarcelarlo.

No obstante, hace un tiempo Douglas se retractó de su testimonio y eso le abrió las puertas al hombre inocente quién, con la ayuda del juez del condado de Jackson, Jean Peters Baker, pudo recuperar su libertad a principios de este año. “Strickland fue condenado únicamente por el testimonio (Douglas), quien posteriormente se retractó de sus declaraciones”, aseveró en un comunicado.Además, agregó que en estas circunstancias únicas, la confianza del Tribunal en la condena de Strickland está tan socavada que no puede sostenerse, y la sentencia condenatoria debe anularse. “Esto trae justicia, finalmente, a un hombre que trágicamente ha sufrido tanto como resultado de esta condena injusta”, concluyó Baker en su comunicado.Tras haber sido liberado, Kevin diálogo con el Washington Post y confesó que su deseo por cumplir en libertad es el de visitar la tumba de su madre, fallecida hace unos meses, y ver por primera vez el mar.La exoneración de Strickland lo convierte en uno de los presos condenados injustamente con más años tras las rejas en Estados Unidos. Según el Registro Nacional de Exoneraciones, de las universidades de Irvine en California y Michigan, unas 2.500 personas absueltas por la justicia en los últimos 30 años han pasado una media de 13,9 años en prisión, con un máximo de 47 años y 2 meses.

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