Cuando queremos calmarnos, dormir o estudiar, la música relajante siempre es la solución perfecta o recomendada. Y es cierto, se ha vuelto una forma de terapia que cada vez cobra más importancia.
Escuchar música relajante que bien puede ser clásica, instrumental, ambiental, jazz suave… Ya sabes, esa música con sonidos suaves, sin cambios abruptos, sin voces o letras que te ditraigan es otro método de relajación que se ha vuelto popular con los años.
Pero además, se ha encontrado que tiene beneficios reales para el bienestar físico, mental y emocional.
ESTOS SON ALGUNOS DE LOS BENEFICIOS:
- Mejora las funciones cognitivas. La música relajante mejora la concentración (por eso es tan recomendada para estudiar) y crea una interconexión entre los dos hemisferios del cerebro para que las neuronas se comuniquen mejor.
- Promueve dormir mejor. El simple hecho de escuchar algunas melodía relajantes antes de dormir mejora la calidad del sueño ya que relaja la mente y el cuerpo.
- Mejora la frecuencia cardíaca. Este tipo de música baja la presión arterial y regula la frecuencia cardíaca.
- Le da un empujón a la creatividad. La música relajante aclara los pensamientos y, como la mente se relaja, nos permite analizar mejor las cosas y encontrar otras fuentes de inspiración o soluciones donde no las habíamos visto.
- Aminora la depresión. Curiosamente, este tipo de melodías calmadas y suaves son capaces de mejorar el estado de ánimo de las personas que padecen depresión y ayuda a aclarar la mente en esas crisis depresivas.
- Da sensación de felicidad. Cuando escuchas este tipo de música, se incrementa la producción de serotonina y endorfinas, lo que te dará una sensación de bienestar y felicidad.
- Calma el dolor. Como parte del punto anterior, se pueden usas estas melodías con pacientes postoperatorios o en tratamientos de recuperación ya que, al incrementarse las enforfinas y la serotonina, se crea un analgésico natural.
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