Poroteando ✍ Carlos Fara

Por: Carlos Fara. Es cierto que el gobierno no tiene los votos aún para imponer el acuerdo con el FMI en la cámara de diputados. Pero todas las negociaciones se encaminan a que lo tenga. Repasemos cómo va el tanteador.

El oficialismo necesita que 129 diputados den el quorum. Hay unos 85 / 90 que van a votar a favor. Con aliados puede estar entre 90 / 95 apoyos. Los más optimistas dicen 100. Los libertarios y la izquierda ya dijeron que van a votar en contra, pero en todo ayudarán al quórum. Faltan aproximadamente unos 30 legisladores para coronar el esfuerzo. Pero acá hay que mirar qué hacen:

  • Los que responden a Máximo (unos 30 miembros): no se sabe si irán a dar quórum, y si lo dan si se abstendrán o votarán en contra.
  • “Juntos por el Cambio: son 56 sacando los del PRO, que son los más reticentes a facilitarle la vida al gobierno”. Para una mejor digestión del acuerdo, los que asistan sería ideal que voten en contra, según las súplicas del oficialismo.

Las negociaciones seguirán hasta último momento bajo la batuta de Sergio Massa. La instrucción que tiene es llegar a un acuerdo, cueste lo que cueste. Si eso implica desairar los caprichos del ministro Guzmán, lo harán. En estas últimas horas el joven economista debe estar acumulando bronca porque el oficialismo “lo podría entregar”, como se dice en la jerga. Así se atenderían algunas demandas de JxC en pos de lograr un trámite rápido y sólido. Porque si la aprobación sale débil y enmarañada podría haber efecto contagio de rebeldía entre los senadores.

Pero claro, el diablo siempre meter la cola, para ambos lados. Ya tuvimos la prueba en diciembre cuando la oposición hizo caer la aprobación del presupuesto, pero luego el oficialismo se salió con la suya en la sesión sobre bienes personales. Por eso la obsesión con el poroteo ahora en mayúscula.

Los de afuera son de palo… relativamente. Esto significa que todo lo que está sucediendo en el contexto va a favor de una aprobación del acuerdo. Veamos algunos detalles:

  1. Todo el arco empresarial viene manifestándose a favor de aprobar.
  2. Lo mismo sucede con la CGT, nada más, ni nada menos.
  3. La mayoría de los gobernadores peronistas
  4. Los medios críticos del gobierno también están alentando veladamente el trámite positivo.
  5. El presidente de la UCR instó a apoyar, poniendo en un brete a todo JxC, pero sobre todo a la tropa propia.
  6. CFK sigue sin hablar y se bajó de un acto en la Universidad de Merlo.
  7. En las comisiones que están analizando el proyecto se reemplazaron miembros oficialistas contrarios al acuerdo por otros que están a favor, sin que Cristina ni La Cámpora ni los mismos perjudicados dijeran nada.
  8. Massa está dispuesto a conceder lo que sea por acordar la presencia opositora, si es necesario entregando todo lo que le pidan.
  9. Por último, el FMI tiene la decisión política de “arreglemos como sea, pero arreglemos”: la convulsión mundial es demasiada.

Vista esta lista, alguien podría preguntarse: “pero entonces ¿quién con poder de veto está en contra?”. La respuesta debería ser: a esta altura, casi nadie. Lo que hay es una guerra de nervios desde los halcones de la oposición para desgastar al gobierno y hacerle pagar el mayor costo posible.

Cristina observa paciente. No va a apoyar explícitamente, pero tampoco Alberto puede quejarse de que le esté poniendo palos en la rueda. Total, lo más probable es que ella no tenga que votar en el senado. Es decir, prescindencia calculada. Su fuerza de choque es la que pone la cara: medio en broma, medio en serio, andan diciendo que van a votar lo mismo que haga el PRO. Pero no todos tocan la misma melodía, ya que Wado de Pedro también apoya. Policía bueno y policía malo, siempre presentes.

Repasando: lo más probable es que:

  • Se reúna el quórum y se apruebe el proyecto, separado el refinanciamiento del programa de medidas, como quiere la oposición;
  • Si los diputados K votan en contra, no afectaría el trámite;
  • Lo importante es que haya legisladores de JxC que den quórum, pero se abstengan (nadie cree que vayan a votar a favor en bloque, pero Morales va a incidir).

Y Macri? Es quien está alentando complicar al gobierno todo lo posible, para mostrarle a propios y extraños que no está muerto quien pelea. Y pelea cada vez más. Es su juego. No lograría juntar una mayoría hoy dentro de la oposición, pero al menos nadie lo va a dejar de tener en cuenta. Tener poco poder es desagradable. Pero ser irrelevante es el ocaso de los dioses.

Ultimo comentario: todo está muy lindo, pero los que sientan en las bancas son los representantes del pueblo y el equilibrio es muy delicado. Una palabra de más o un gesto de menos pueden complicar todo el entramado. Y hasta que la pantalla electrónica no marque el “proyecto aprobado”, los antitranspirantes no van a hacer mucho efecto en el gobierno.

(Por: Miradas)

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